Este blog ha debido permanecer inactivo más días de lo acostumbrado y, lógicamente, durante este tiempo han ocurrido bastantes cosas en nuestro país; sin mirar demasiado hacia atrás porque la actualidad manda hay, sin embargo, algo que no quisiera dejar de comentar y que tuvo lugar al producirse el anuncio de la disolución de ETA. La banda terrorista fue derrotada tiempo ha, esta repulsiva representación ya ha sido extensamente comentada a todos los niveles y por muchos opinadores por lo que no merece la pena añadir nuevas apostillas, más allá de dedicarles todo el desprecio que se merecen esperando que, por una vez, sea cierto lo prometido por el gobierno y que no obtengan contrapartida alguna.
Pero, como decía anteriormente, hay un hecho que no me gustaría dejar de comentar, trance cuasi tan vomitivo como el anterior que, en mi modesta opinión, no ha sido ni lo bastante resaltado ni objeto de adecuada y suficiente repulsa: Ningún partido u organización medianamente solvente asistió a tan nauseabundo acto en la localidad francesa de Cambo-les-Bains, pero para todo hay gentes envilecidas. Además de infamemente insignes personajes extranjeros como Gerry Adams o Cuauhtemoc Cárdenas, allí acudieron algunas ruines celebridades, con DNI español mal que le pese a algunos: como era de suponer, BILDU -la marca política de ETA-, los sindicatos abertzales LAB y ELA, además del sempiterno recolector de nueces, el PNV, y representantes de UGT y Podemos.
Podrán alegar las direcciones nacionales, tanto de UGT como de Podemos, que los asistentes pertenecían a sus filiales vascas. Bueno y qué más dará si todos son más de lo mismo y viajan en el mismo barco.
Dime de quien eres mamporrero y te diré a quien te asemejas y de qué deberías avergonzarte si tuvieses dignidad.