Por fin he logrado comprender el significado de la palabra diálogo. Después de cansarme de defender que es imposible alcanzar acuerdos razonables con el nacionalismo excluyente que solo sabe avanzar y no retroceder sin dar nada a cambio, después de repetir una y otra vez que solo fuera de la legalidad se pueden ofrecer dádivas que contenten a los independentistas sin que a ellos les tiemble el pulso para seguir inalterablemente su camino sin que cedan en ninguno de sus objetivos o prometan dar alguna contrapartida aceptable, empiezo a creer que quizá yo estaba equivocado… y espero que se entienda la ironía.
Era evidente que no todo lo que ERC pedía a Pedro Sánchez le podía ser concedido, pero eso no puede ser considerado como un éxito de su equipo negociador porque aunque hayan llegado hasta el extremo de casi rozar la ilegalidad, no tenían capacidad para ceder más. Pero sí, se ha llegado a estar cerca de quebrar la ley y se han pasado algunas líneas rojas que resultan absolutamente peligrosas. Y todo solo a cambio de una abstención en una investidura vergonzante, de lo único que les preocupaba, seguir durmiendo en el colchón de la Moncloa a costa de lo que fuera.
Eso era el dialogo: Yo te doy lo máximo que pueda, estoy dispuesto a estirar la cuerda hasta que casi se rompa sin que me importe una higa dejar un camino sembrado de minas para el futuro -que ahí radica uno de los principales problemas-; tú me permites la investidura con una abstención y con eso ambos tenemos suficiente.
Al partido que encabeza un mentiroso compulsivo e irresponsable sin escrúpulos, auxiliado por una cohorte de personajes tan carentes de principios como él, me resisto a llamarlo PSOE. No es el partido socialdemócrata que tanto costó a Felipe González conformar según el modelo keynesiano y europeo. La verdad es que no se me ocurre ninguna forma homologable de calificarlo. Ni socialista, ni obrero y menos español. Así que aquí lo dejaremos en el partido P (partido) que tanto sirve para definir una formación política como un grupo roto y abierto en canal, como es lo más probable que les acabe sucediendo.
En P están dispuestos a aplicar la mayor parte del programa económico de Unidos Podemos al que se le concederán, si llegan a gobernar, una Vicepresidencia y cuatro Ministerios -¡con solo 35 Diputados!-. Si logran la investidura, España sería el único estado europeo en el que gobiernan en coalición socialistas y comunistas.
El oscurantismo ha sido la norma de todas las negociaciones por parte de quienes tanto clamaron en pro de la transparencia con luz y taquígrafos. Se han hecho algunas ruedas de prensa, pocas y sin permitir preguntas porque a dialogantes no hay quien les gane. A pesar de todo hemos podido conocer una parte de lo que pretenden pero una parte que nos alarma en grado sumo a muchos, incluidos bastantes socialistas. Veamos: Se ha prometido al eterno recogedor de nueces, PNV, adecuar las estructuras del estado para convertir en Naciones a Cataluña y País Vasco. Se ha convenido con el mismo partido expulsar a la Guardia Civil de Navarra, lo que significa una clara intrusión en las competencias de una Comunidad vecina, con gran satisfacción de su Presidenta, Chivite, y lo que puede significar el principio de aquella ocupación/invasión que tanto buscó ETA y ahora ansía Bildu, con quien se ha acordado algo que se parece mucho a una agenda camino a la autodeterminación. A Junqueras se le está indicando claramente el camino del indulto de facto. En el acuerdo que nos han mostrado con ERC no aparece la palabra Constitución -sustituida por “Ordenamiento Jurídico”- pero se reconoce que en Cataluña hay un conflicto político y no un problema ciudadano. Aceptan que para afrontar lo de Cataluña no deben actuar los tribunales, es decir que los golpistas podrían llegar a delinquir sin consecuencias. Crean una mesa de trabajo entre gobiernos – al mismo nivel- que empezará a trabajar 15 días después de la formación de gobierno. Con algarabía -por algo será- ha sido recogido por el independentismo el acuerdo para que se celebre “en Cataluña solo” una “consulta” para que los catalanes acepten las medidas acordadas en la mesa, lo que no acabará siendo más que la celebración de un referéndum plebiscitario puesto que eso de “dentro del ordenamiento jurídico” no suena más que como un eufemismo, una consulta que los nacionalistas se encargarán de hacer, planteando la pregunta de forma que más le interese, para que se asemeje a lo que ellos desean mientras todos los cabecillas de P siguen a lo suyo, un P que es lo que es aunque casi nadie lo entienda.
Toda una hecatombe que no parece tener fin y de la que lo relatado en este resumen solo parece ser el principio.
"Se han escrito tantas cosas, ¿no?... Se decía a principios de año que yo iba a vender mi alma para ser presidente del Gobierno e iba a aceptar el chantaje de Iglesias de la vicepresidencia con el CNI, cargándonos la independencia de los jueces y fiscales y que íbamos a hacer descansar la gobernabilidad de España en fuerzas independentistas" Pedro Sánchez, octubre de 2.018 entrevista con Pepa Bueno.
Veamos solo algunas más de las muchas afirmaciones que delatan a un doctor cum fraude, frívolo narcisista, que hace mucho perdió toda credibilidad y quien declaró secreto de estado sus paseos en el Falcon y los gastos a costa del erario de su costilla a la que supo enchufar en un puesto de trabajo chupi lerendi en donde nunca le han visto el pelo: 1.-Ni antes ni después, el partido socialista va a pactar con el populismo de la Venezuela de Chaves, las cartillas de racionamiento, la pobreza, la falta de democracia y, sobre todo, la desigualdad. 2.-Todas las negociaciones serán con luz y taquígrafo. Todas. 3.-¿Dónde están todos aquellos que decían que yo pactaría con el independentismo? A ver ¿dónde están? 4.-Yo soy un político que hace lo que dice. 5.-"incorporaré en el Código Penal un nuevo delito, para prohibir de una vez por todas la celebración de referendos ilegales en Cataluña". 5.- Yo me comprometo a traer a Puigdemont a España y a ponerlo ante la justicia. 6.-Con Podemos en el gobierno, yo sería un presidente que no podría dormir, como el 95% de los españoles.
Pero no me resisto a mostrar aquí también el mismo vídeo que la Asociación por la Tolerancia exhibió por Madrid con un camión portando una pantalla gigante la tarde del 03 de enero. Su elocuencia es suficiente
El 07 de enero, en poco tiempo, la resolución final. Si ustedes creen en Dios, recen y si no son creyentes también les aconsejo que lo hagan, aunque solo sea por si acaso.